U¡Hola No Páusicxs queridxs!

Este tema no estaba previsto para el mes pero nos volvieron un poco locas a preguntas así que acá estamos y después de bastante investigación y algunas consultas con especialistas, les traemos una nota sobre la famosa raíz peruana: LA MACA

Rápidamente les contamos que se trata de una plata que crece en los Andes peruanos y de la cual suele comerse su raíz que es parecida a un rábano. Parece que, si bien hay muchas variedades de esta planta, las que brindan mayor beneficio son la maca amarrilla, negra y roja (esto en función del color externo de la raíz).

Ahora bien, ¿por qué estamos hablando de esta planta? Bueno, resulta que según muchxs de ustedes y varios estudios, la maca incrementaría  el bienestar y ayudaría a prevenir o tratar distintas enfermedades ya que es un adaptógeno.

¿Y que es un adaptógeno?  Son hierbas que poseen cualidades específicas que ayudan a tu cuerpo. Es común confundirlos con alimentos, pero en realidad son hierbas que se pueden agregar a las bebidas (busca su versión en polvo) o se pueden tomar como suplementos en cápsulas.

De acuerdo a la nutrióloga holística Priscilla Soler, “Los adaptógenos son las reinas de las hierbas medicinales para restaurar la salud, vitalidad, inmunidad, resistencia y longevidad”. Su mismo nombre lo dice: se adaptan. No sirven un propósito único, sino que identifican lo que tu cuerpo necesita y se adecuan a él para restaurar un balance.

Empecemos por lo básico: ¿cuál es su composición nutricional?

Por cada 100 gramos, la maca tiene:

  • Carbohidratos: alrededor de 60 gramos (algunos tipos llegan hasta 70)-
  • Fibra alimentaria: 8 gramos
  • Lípidos: 1 gramo
  • Proteínas: 10 gramos
  • Minerales: hierro (14,7 miligramos), calcio (250 miligramos), potasio (2050 miligramos), zinc (3,8 miligramos) y cobre (5,9 miligramos)
  • Vitaminas: Vitamina B3, 43 miligramos

Ahora bien, como ya se imaginarán nadie ha descubierto la pólvora. Ya los pueblos originarios de Perú conocían las propiedades de esta raíz y la usaban, entre otras cosas, para mejorar la fertilidad femenina.

Con el tiempo se han ido haciendo estudios y al día de hoy está comprobado que sus beneficios son:

  • Incrementa el nivel de energía y dar una sensación revitalizante
  • Aumenta la fertilidad femenina y masculina (tal vez esto no nos interese tanto…)
  • Disminuye el riesgo de osteoporosis
  • Como comentamos arriba ayuda a combatir los síntomas de la menopausia (…esto nos interesa mucho)
  • Tiene una potente acción antioxidante y antienvejecimiento.
  • Protege a la piel del daño producido por la exposición a la radiación solar
  • Mejora la capacidad física y aumenta el rendimiento de deportistas
  • Incrementa la sensibilidad a la insulina y normaliza los niveles de glucemia (nivel de azúcar en sangre).

En resumen y yendo a lo que nos importa, gracias a sus propiedades, la maca entonces actuaría como “regulador” para controlar los síntomas de la menopausia como: insomnio, irritabilidad, resequedad vaginal, sofocos y ansiedad. Además, ayudaría a la memoria y a proteger los huesos.

Importante: ¡no es un milagro y los resultados no son inmediatos! El consumir maca todos los días ayudaría a que los síntomas de la menopausia disminuyan, pero paulatinamente.

Después de saber todo esto, nosotras corrimos a comprarla y ahí nos surgieron algunas dudas, empezando por:

¿Qué gusto tiene?

Para quienes saben (y parece que han testeado más de una), la Maca amarilla es más fuerte, algo picante y amarga. Sin embargo, dicen que es cuestión de acostumbrarse. Suele combinarse con cacao, chocolate, plátano, leche de almendras, café, canela, dátiles o leche de vaca. La Maca roja es la más dulce y suave, mientras que la Maca negra es ligeramente amarga.

¿Cómo tomarla?

Dicen que lo mejor es ir aumentando progresivamente su consumo y que se recomienda empezar con una cucharadita diaria durante la primera semana, luego progresar a dos cucharaditas diarias y, finalmente, llegar a las tres cucharaditas por día.

La mayoría de las veces adquirimos maca en polvo y esa debe disolverse en algún líquido (agua, té, leche, batidos, café, juegos), yogur o sopas, o también puede mezclarse con cereales, granola (preparación a base de avena, pasas y almendras) o masas para galletas, bizcochos, tortitas o gofres.

En el caso de las cápsulas, se aconseja tomarlas junto con las comidas de desayuno o almuerzo, acompañadas con un sorbo de agua. ¡Ojo al piojo! No es recomendable consumirla de noche porque puede provocar insomnio (y no queremos más de lo que ya tenemos).

Último pero no menos importante… ¿existen contraindicaciones?

La maca es segura e inofensiva. Solo algunas personas han experimentado efectos adversos leves durante los primeros días de consumo (dolor de estómago, insomnio, náuseas, mareos, nerviosismo, erupciones, flatulencia e hinchazón abdominal). Ahora bien, como todo en exceso podría no ser positivo, lo mejor es respetar la dosis del fabricante.

¡ATENCIÓN!

La maca no es aconsejable para:

  • Personas que sufren alguna enfermedad de gravedad y/o tomen medicación crónica (consultar previamente a su médico de cabecera).
  • Embarazadas y lactantes.
  • Personas con insuficiencia renal o hepática. Tampoco quienes sufren de insomnio.
  • Personas que tienen trastornos tiroideos. Deben consultar sí o sí a su médico endocrinólogo antes de tomar Maca porque podría causar un desequilibrio hormonal.

Fuentes: