¡Temas tabúes si los hay! Les compartimos una nota increíble que nos trae la Lic. Shiri Raed, Kinesióloga Fisiatra (M.N.16792) para entender un poco más los tratamientos y – más importante – las formas de evitar la incontinencia urinaria.
Cuando hablamos de incontinencia urinaria de inmediato se nos vienen a la cabeza una serie de ideas preconcebidas, muchas de ellas cargadas de mitos tal como sucede en aquellos saberes colectivos que no se cuestionan y se mantienen en el tiempo a pesar de ser perjudiciales.
Esos MITOS son por ejemplo aquellos que RELACIONAN A LA INCONTINENCIA URINARIA A UN INEVITABLE PADECIMIENTO ASOCIADO AL PASO DEL TIEMPO, A LOS PARTOS O SIMPLEMENTE A SER MUJER, y que su ÚNICA SOLUCIÓN ES USAR PAÑOS ABSORBENTES, mientras que PASIVAMENTE ESPERAMOS el largo camino que finalmente nos llevará a la supuestamente mágica “resolución quirúrgica”.
Si bien es cierta la presencia de incontinencia urinaria luego de los 40 años, y que la paridad es uno de sus principales factores de riesgo, también lo es que es posible prevenirla realizando rehabilitación en el post parto, y detenerla o revertirla cuando la abordamos de manera temprana.
Si actuamos a tiempo y de manera preventiva podemos encontrar tratamientos efectivos para mejorar significativamente esta disfunción que, a pesar de ser muy frecuente, es evitable.
¿A qué llamamos Incontinencia Urinaria?
Esta disfunción se define como la pérdida involuntaria de orina. Esto puede ser: de Esfuerzo (al toser, estornudar o saltar) o de Urgencia, que se manifiesta como una necesidad inminente de orinar, que se presenta de manera brusca y en algunas ocasiones no da tiempo de llegar al baño. Esta forma, muchas veces se asocia a una frecuencia miccional aumentada (orinar muy seguido) o nicturia (levantarse de noche varias veces para orinar). Puede ser también por rebosamiento, y a veces presentarse de manera mixta.
Las CAUSAS son variadas y muchas veces pueden combinarse.
Lo primero a tener en cuenta es la MANERA EN QUE LA PERSONA GESTIONA SUS ESFUERZOS, es decir las presiones intraabdominales. Para comprender esto debemos entender el cuerpo como un conjunto de presiones neumáticas, y que de realizarse una mala gestión de esas presiones, se ponen en desventaja todos los mecanismos esfinterianos. En este proceso es fundamental el buen tono del transverso abdominal, un musculo muy profundo con forma de faja que nos sostiene en la postura correcta. Esta musculatura abdominal puede verse debilitada en caso de EMBARAZOS, SOBREPESO Y SEDENTARISMO, por eso la prevalencia de incontinencia en estos casos.
¿Qué sucede con la incontinencia es la MENOPAUSIA y el CLIMATERIO?
Como ya sabemos, en esta etapa experimentamoscambios hormonales importantes que producen alteraciones en todo el cuerpo, y particularmente en el suelo pélvico.
Como los cambios en la mucosa vaginal, también se producen cambios en la mucosa de la Uretra. Los efectos son un aumento de la luz en el calibre uretral facilitando las pérdidas de orina .Por otro lado, los cambios que se manifiestan en el colágeno en todos los tejidos, incluidos los que conforman las estructuras de sostén (ligamentos) y los de cierre (músculos) , también favorecen el vencimiento de los mecanismos esfinterianos y la aparición de pérdidas.
Pero entonces… ¿Qué podemos hacer?
Cada una de las causas y los factores de riesgo mencionados pueden ser abordados desde la recuperación con kinesioterapia especializada.
Ahora bien, es muy importante el abordaje temprano, rehabilitar el post parto inmediato, recuperar el tono del transverso abdominal y de la musculatura de suelo pélvico.
Luego de este período, cuando aparezca algún síntoma, acudir lo antes posible a consultar con un especialista que realice una evaluación exhaustiva para determinar las causas que originaron la incontinencia y poder elegir el tratamiento apropiado.
Hay diferentes métodos de trabajo pero uno de los principales es el Biofeedback, se trata de un electromiograma, es decir un aparato cuyos receptores ubicados en puntos específicos del cuerpo del paciente, enviaran a una pantalla la devolución de lo que se está trabajando a nivel muscular. Esto se utiliza para recuperar la consciencia de la musculatura de suelo pélvico y se trabajan las cadenas musculares que nos llevarán a una CORRECCIÓN DE LA POSTURA y de la gestión de presiones.
En los casos en que se detecta un síndrome genitourinario, la rehabilitación se complementa con RADIOFRECUENCIA, una tecnología que provoca una hipertermia profunda en la mucosa vaginal y uretral regenerando dichos tejidos mediante un aumento en la vascularización, aporte de oxígeno y nutrientes, además de que el calor provoca tensado del colágeno de las paredes vaginales mejorando su estructura. En pacientes que hayan tenido daño estructural debido a partos vaginales, desgarros o episiotomías se trabaja la recuperación específica con ELECTROESTIMULACIÓN para recuperar la función neurológica y estimular a la musculatura afectada. Y por último se realiza también el acompañamiento con Gimnasia Abdominal Hipopresiva qué será de mucha ayuda en la reeducación de la gestión de presiones y mejorar el tono abdominal sin que el suelo pélvico sufra presiones excesivas.
En tiempos de empoderamiento femenino, frases como “Es la edad” o “Usá toallitas” ya no son respuestas posibles. LA INCONTINENCIA URINARIA TIENE UN TRATAMIENTO SEGURO, NO INVASIVO Y ALTAMENTE EFECTIVO.
Es fundamental que las mujeres tomemos conciencia de nuestro cuerpo y estemos informadas sobre los tratamientos existentes para poder disfrutar plenamente de cada momento de la vida.
Lic. Shiri Raed – Kinesiologa Fisiatra (M.N.16792) / Master en Suelo Pélvico Universidad Internacional de Andalucía / Diplomada en Pelviperineología Avanzada / Profesora Nacional de Educación Física / Directora en Pelvine centro integral de rehabilitación de Suelo Pelvico