Presentado por: @hoyelijo.ar

¿Que gran pregunta no? Los cambios hormonales – y la poca información – alrededor de esta etapa confunden y nos hacen preguntarnos: ¿cuándo se supone que dejamos de ser fértiles?

Esa duda tan común, muchas veces mal contestada, puede dar lugar a “sorpresas” inesperadas como un embarazo. ¿Qué? ¿Embarazo en este momento? ¡Sí! Según diferentes estudios, el 10% de las mujeres siguen fértiles durante la perimenopausia. Parece poco pero no es tan así si estimamos que para el 2030 vamos a ser mil millones…

Para poder seguir, tenemos que recordarles algo IMPORTANTE: la menopausia es un solo día de nuestras vidas. Como la primera menstruación, la menopausia es el último día de nuestro último período. Y sabemos que estuvimos menopáusicas, después de 12 meses continuos sin menstruar. Ocurre con más frecuencia entre los 48 y 51 años de edad y marca el final del período reproductivo. En teoría, una vez pasados esos 12 meses, el cuerpo no ovula más, por lo que sería prácticamente imposible quedarse embarazada de manera natural (no así a través de técnicas artificiales). Y ojo que decimos prácticamente, pero no es un 100% imposible. Hay personas – no son comunes los casos, pero existen – que pasan 12 meses sin regla y tras ese período, la regla vuelve a bajar…

Si pensamos en términos de edades los estudios muestran que, a partir de los 35 años, las posibilidades de concebir se reducen a la mitad. A partir de los 40 años, esas posibilidades son aún menores, pero como hablamos arriba ¡no imposibles!

Dato Interesante: durante la perimenopausia también puede suceder que esas ovulaciones se aceleren, produciéndose ovulaciones dobles que pueden dar lugar a embarazos gemelares. ¿Qué tal? ¿Flor de sorpresa no? La menopausia puede llegar a tener “dos nombres propios”.

Pero vamos a la “pregunta del millón”: ¿Cómo evitar un embarazo en la perimenopausia?

Bueno… como esta fase se caracteriza por la menstruación irregular,  se recomienda seguir tomando precauciones hasta 2 años después de haber dejado de tener el período. Y hablamos de NI UNA GOTA: Inclusive, es importante hacer un examen hormonal que lo confirme y que el/la especialista indique si realmente podemos dejar de cuidarnos (no olviden tampoco la prevención de las Infecciones de Transmisión Sexual, ¡y para esto no hay fecha de caducidad!).


Veamos los tipos de métodos anticonceptivos (¿Qué opciones tenemos?):

Existen muchos métodos anticonceptivos a los que podríamos recurrir. Elegir entre uno u otro depende de cuál se ajusta mejor a tu cuerpo, estilo de vida y circunstancias personales. Es importante recordar que no hay un anticonceptivo que sirva para todxs, o sea, el que te viene bien a vos, no tiene por qué ser el indicado para tu amiga.

HORMONALES:

Introducen hormonas a nuestro cuerpo. Pueden ser pastillas, parche transdérmico, anillo vaginal, inyecciones, implante subdérmico, etc. En algunos casos, ayudan a regular el ciclo y aliviar los sofocos.

 → Dispositivos Intrauterinos (DIU) hormonales: método anticonceptivo de largo plazo (al igual que los anteriores disponen de un depósito que libera pequeñas cantidades de hormonas localmente dentro del útero y no contiene estrógenos.) Muchxs médicxs sugieren este último en la perimenopausia. Su duración es por un período de 3 a 5 años según el modelo.
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NO HORMONALES:

También está el conocido DIU de cobre, de largo plazo, que produce una respuesta inflamatoria siendo así “tóxico” para los espermatozoides.

Esterilización quirúrgica: procedimiento seguro y de manera permanente (ligadura de trompas y vasectomía).

Métodos barrera: los más conocidos son los preservativos. Otros son: preservativo femenino, diafragma, esponjas vaginales y espermicidas.

¡ATENCIÓN!

No se consideran métodos anticonceptivos: los lavados vaginales después de mantener relaciones sexuales, el coito interrumpido o la famosa “marcha atrás”. En el caso de los espermicidas, se usan junto a otro anticonceptivo como el diafragma, para que tenga mayor eficacia.

¡Desde No Pausa no recomendamos anticonceptivos “naturales”!. No son considerados muy seguros ya que para su uso correcto se necesita un gran conocimiento del funcionamiento de nuestro cuerpo. Y, cuando estamos en la perimenopausia, el subi baja hormonal los hace todavía menos efectivos.

En este último grupo, los más conocidos son: el método MELA, usado los primeros seis meses después del parto; la toma de la Temperatura Basal, ayuda a predecir cuándo vas a ovular mediante el seguimiento de los cambios en tu temperatura corporal; el método Ogino, registro de cuáles son los días fértiles y el método Billings que consiste en observar la presencia y características del moco cervical.

Resumamos un poquito, ¿cuáles son los más efectivos? Vamos con los porcentajes:

  • Efectividad del 99%: vasectomía, ligadura de trompas, DIU, anillo vaginal, pastilla anticonceptiva, parche anticonceptivo, implante anticonceptivo e inyección anticonceptiva.
  • Efectividad del 98%: condón masculino.
  • Efectividad del 95%: preservativo femenino.  
  • Efectividad del 94%: diafragma.
  • Efectividad del 91%: esponja anticonceptiva.
  • Efectividad del 85%: capuchón cervical.

Y entre los más efectivos, ¿qué es mejor la píldora, el DIU o el anillo?

Tengamos en cuenta que todo depende de las circunstancias de cada persona. Cada cuerpo es un cuerpo con un historial médico único que debe ser llevado en cuenta a la hora de decidir el mejor anticonceptivo.

  • Si hablamos de efectividad, la píldora, el DIU y el anillo vaginal tienen un 99% de efectividad.
  • Si hablamos de comodidad el DIU se coloca una sola vez y ya te olvidas hasta que este deba ser retirado -que puede ser en un período de 3 a 5 años-; mientras que la píldora es una toma al día; y el parche debe colocarse cada semana.

Ahora bien… caso suceda, ¿cómo es el embarazo en la perimenopausia?

El embarazo durante la perimenopausia puede ser de alto riesgo tanto para quien gesta como para el/la bebé. Los síntomas son los mismos que en un embarazo común – y por eso tan fáciles de confundir con los síntomas de la perimenopausia – como mareos matutinos, somnolencia, cambios de humor. La principal diferencia es que la mujer puede descubrir que está embarazada más tarde, ya que el retraso menstrual es uno de los primeros síntomas del embarazo y los períodos espaciados e irregulares, el principal síntoma del climaterio. 

En No Pausa tenemos varios casos de “síntomas de la perimenopausia” que ya tienen nombre propio y caminan…

¡Importante No Páusicxs! Caso haya sucedido, es fundamental el control por parte de los profesionales de la salud. Cualquier embarazo después de los 40 años de edad aumenta algunos riesgos: posibilidades de diabetes gestacional, eclampsia, aborto, parto prematuro y la probabilidad de que el bebé tenga algún problema en su desarrollo. Nos encantaría decir algo diferente, pero es así: los embarazos siempre necesitan atención, pero después de los 40, aún más.

Para cerrar, lxs médicxs tienen distintas miradas y preferencias sobre métodos anticonceptivos, lo importante es que pregunten y se saquen todas las dudas para poder encontrar la opción que mejor se adecúa a su cuerpo, necesidades, etapa y circunstancias personales. ¡No existe un único método para todxs!

Fuentes: